Nuestros carbones

Los carbones vegetales

El carbón vegetal se obtiene del procesado de madera en hornos cerrados donde se eleva la temperatura hasta los 700 grados, desecándola completamente y cociéndola. El resultado es una elevación del poder calorífico, situándole muy por encima del de la madera sin procesar. Por sus características, es ideal para generar brasas muy calientes, consistentes y duraderas, perfectamente adaptadas para el uso en parrillas y barbacoas.

Como alternativa al carbón de encina te proponemos el carbón de quebracho argentino que se produce a partir de una de las maderas más duras de Sudamérica, lo que le confiere un poder calorífico elevado, pocas chispas y una combustión más larga. Se trata de un producto importado que se usa principalmente en entornos profesionales: asadores, restaurantes, parrillas; donde su exquisito aroma y la longevidad de sus brasas lo convierten en la base perfecta para las mejores carnes y verduras asadas. También está disponible en sacos para su uso doméstico.

El carbón mineral

A diferencia del carbón vegetal, proveniente de la carbonización de la madera, el carbón mineral se extrae de minas y es considerado, al igual que el petróleo, como combustible fósil. Tiene un altísimo poder calorífico por lo que su uso principal es el de calefacción, y también alimenta industrias o sirve para la generación de energía. Rara vez se usa en cocinas, donde es mejor el carbón vegetal. Nuestro carbón mineral está disponible en sacos de 30 kg y es muy adecuado para calefacción, tanto en casas unifamiliares, como comunidades de vecinos, edificios.